La artista sostuvo que se sabe de la existencia de la ley, pero no hay conocimiento sobre cómo debe implementarse.
La ley de cupo en eventos musicales, sancionada en 2019, busca garantizar la participación de un mínimo del 30% de mujeres y diversidades argentines o residentes. Sin embargo, todavía existe un desconocimiento sobre los pormenores de esta ley nacional; por esta razón, la artista Charo Bogarín dicta capacitaciones en distintos puntos del país.
En la provincia de Corrientes, lo hizo en las instalaciones del Teatro Oficial Juan de Vera, desde donde resaltó la importancia de esta legislación. “El espíritu de la ley es ser preventivo, para que podamos cambiar el ecosistema musical, la realidad musical para músicos, músicas y músiques”, aseguró durante su disertación.
Las distintas capacitaciones y charlas que se realizan tienen que ver con el grado de desconocimiento que les productores de eventos tienen acerca de la ley. Al respecto, la artista y vicepresidenta del Instituto Nacional de la Música (INAMU) expresó: “Me pongo al hombro el salir a difundir para hacer respetar y valer la ley en los escenarios”.
Desde el Instituto Nacional de la Música pretenden dar a conocer los requerimientos y objetivos de la normativa, la cual es obligatoria. Este organismo se encarga de controlar y agotar todas las alternativas para que mujeres y disidencias estén presentes en los escenarios. Es decir, es el ente de aplicación de la ley.
¿Qué dice la ley?
La ley 27.539 establece un porcentaje mínimo de músiques en los escenarios; tanto en eventos públicos como privados, con o sin fines de lucro. La única manera de demostrar el cumplimiento es a través de una declaración jurada presentada por la organización del evento.
Dicho documento debe presentarse dentro de los 90 días previos a la realización del evento y detallar les artistas que integran la grilla. En caso de alcanzar o superar el porcentaje del 30% el INAMU otorgará el Sello de Reconocimiento; y en caso contrario, se iniciarán acciones vigentes en la normativa.
“La actitud de la ley es que si, por ejemplo, hay una denuncia sobre un evento que no cumple, nosotros empezamos a movernos y a ver quién está detrás de la organización. Esto es porque queremos prevenir, no afectar a los programadores”, aseguró Charo Bogarín.
Quienes no cumplan con lo establecido deberán pagar una multa equivalente al 6% del costo del evento.
Asimismo, la artista remarcó la importancia de prevenir las sanciones y aseguró: “Lo que yo quiero es cambiar la realidad. No quiero cobrar multas, que, dicho sea de paso, van dirigidas a proyectos independientes como fomento para artistas”.
Esta herramienta respeta la Ley de Identidad de Género (26.743) y, a su vez, establece trabajos interministeriales. De esta forma, el Ministerio de Cultura de la Nación trabaja en conjunto con el Ministerio de las Mujeres, Género y Diversidad y el Ministerio de Turismo. En este sentido, hay reuniones en cada sector del país: Noreste, Noroeste, Nuevo Cuyo, Patagonia, Centro y Área Metropolitana.
¿Cómo surgió la iniciativa?
“Por más Mujeres y Diversidades Músicas en Nuestros Escenarios” es el nombre que recibió la mesa de trabajo que formuló las bases para que la norma fuera posible.
“Esta ley no surge de los funcionarios públicos, no surge desde la legislatura, sino que surge de una mesa de mujeres; surge desde las bases, de mujeres y diversidades organizadas”, aseguró la vicepresidenta del INAMU.
Dicha mesa propuso como una de sus primeras actividades crear el Registro Único de Músicas, y en la actualidad llevan registrades más de 80 mil artistas. El registro además de ser “sencillo y gratuito”, les permitirá a les cantantes acceder a herramientas de fomento para sus proyectos.
Sobre esta cuestión, Charo Bogarín resaltó la importancia de registrarse, ya que le permitirá al INAMU reunir a les cantantes en los eventos que no cumplan con el mínimo indicado.
Además, la artista señaló que “la discriminación es positiva” y explicó que “se pide un mínimo del 30% porque se estima que a lo largo de los años ese porcentaje va a ir creciendo; si no se pide un porcentaje mayor es porque los números no dan”.
Por otra parte, sostuvo que desde el organismo de aplicación apelan a recorrer todas las instancias previas para ayudar a les organizaderes de eventos a que cumplan con el requisito. “Nosotros queremos prevenir y para eso necesitamos una buena relación; una relación de diálogo”, indicó.
Charo Bogarín sobre el alcance de la normativa
Vale mencionar que sólo aportan al cumplimiento del cupo las músicas mujeres y diversidades nacionales o residentes; por lo cual, quedan excluides les bailarines, locutores, actrices y actores o cualquier otra persona de la actividad artística que no sea la música.
La cantante explicó que esto se debe a que la normativa regula sólo al sector de les músiques. Agregó que “las leyes nacen de una actividad organizada, y es una ley creada y regulada para ese sector”. Pero instó a que las personas del resto del ambiente también se organicen y sienten precedente.
Charo Bogarín reflexionó sobre la importancia de fomentar este tipo de acciones, ya que se trata de “políticas de género y es un logro que un festival pueda decir ‘estoy cumpliendo con la ley de cupo’”.
Para finalizar remarcó que es un logro que tiene que ver “con lo que pasa en el tejido social, que es un reclamo de derechos, de presencia de mujeres y diversidades en los escenarios”.