El episodio sucedió en la oficina de la empresa de viajes Auckland, ubicada en calle Bartolomé Mitre
al 800, donde en horario laboral, los empleados decidieron a filmar a una mujer que revisaba un
contenedor y lo publicaron en sus redes sociales.
Los comentarios que se escuchan entre risas comparan a la señora como comensal en un
restaurante haciendo alusión al recipiente de residuos. “Mirá los cubiertos», «en el Gordo Mario
eligiendo la comida; en Loco por la Pizza», «Una Paso de los Toros, por favor», son algunas de las
frases que quien filma expresa mientras tiene el aval y arenga de sus compañeros.
“El video lo llegué a ver porque me tienen en mejores amigos de Instagram ya que conozco a dichos
chicos, ambos coordinadores de Auckland. Automáticamente me generó repudio esa actitud de
burlarse de las personas en situación de calle por lo que decidí grabar la pantalla y hacerlo
público”, dijo Milagros, quien compartió el vídeo
“Más que nada fue un impulso el subirlo a redes. Pero a mi y creo que a todos los que ayudaron a
difundir, no nos gusta que este tipo de personas, que están a cargo de coordinar viajes de
adolescentes y niños y que tienen que dar el ejemplo”, añadió.
A los pocos minutos, el contenido tuvo una gran difusión junto con el repudio de los usuarios y
vecinos.
MIRA EL VIDEO: https://youtube.com/shorts/EbTxT8YVDak
(https://youtube.com/shorts/EbTxT8YVDak)
“Luego de viralizarse, uno de los pibes me habla por privado pidiéndome disculpas si llego a
ofenderme, las cuales no acepté, porque si me ofendí, puesto que le clave el visto y no le respondí”,
explicó Milagros.
“Tras mi actuación de no contestarle, prosigue a subir un estado, obviamente sarcástico y poner
‘chistesin’”, agregó.
El material fílmico continúa disponible recibiendo cientos de comentarios en rechazo a la forma de
actuar y expresarse de los involucrados, así como también concientizando para que hechos como
este no sigan ocurriendo.
Se logro tomar contacto con el gerente general de Auckland, Juan Ignacio Baldoni quien
hizo público que la firma “repudia total y enérgicamente cualquier hecho discriminatorio” y confirmó
que inmediatamente advirtieron la conducta de los empleados “hemos tomado cartas en el asunto”
y “ya fueron separados de la empresa”.