El CONICET desarrolló un dispositivo que convierte CO2 en oxígeno y biomasa.

Especialistas del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) en colaboración con Y-TEC (la empresa de tecnología de YPF) diseñaron y pusieron en funcionamiento un dispositivo con la capacidad de absorber dióxido de carbono y, a cambio, generar oxígeno.

Ubicado en una estación de servicio en el barrio porteño de Belgrano, este innovador sistema aprovecha la capacidad de las microalgas autóctonas para convertir el dióxido de carbono y la luz, ya sea natural o artificial, en oxígeno y biomasa.

El proyecto original, conocido como Liquid 3, fue concebido por el Instituto de Investigación Multidisciplinar de la Universidad de Belgrado en Serbia. La capacidad de purificación del aire de cada unidad de este dispositivo equivale aproximadamente a la de 20 árboles forestales jóvenes.

El diseño del dispositivo permite su funcionamiento con agua de lluvia recolectada de los techos de la estación de servicio o de estructuras urbanas similares. Una vez que las algas fueron cultivadas y crecieron, se separan las células y gran parte del agua puede ser reutilizada para riego o, en su caso, reciclada para iniciar un nuevo ciclo de cultivo.

Esta iniciativa se basa en un innovador enfoque de sostenibilidad alternativa, especialmente adecuado para entornos urbanos que enfrentan restricciones de espacio o que sufren altos niveles de contaminación, lo que dificulta la plantación tradicional de árboles.

El CONICET desarrolló un dispositivo que convierte CO2 en oxígeno y biomasa
La creación tuvo lugar como parte de un acuerdo de Investigación y Desarrollo establecido entre INBIOTEC y el Y-TEC. Crédito: Inbiotec-conicet.gob.ar.

Purificando el aire con innovación ecológica

El dispositivo Y-ALGAE, fruto de la colaboración entre Y-TEC y el Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Biotecnología (INBIOTEC) de Mar del Plata, alberga en su interior microalgas nativas del sudeste de la provincia de Buenos Aires.

Estos microorganismos son capaces de realizar la fotosíntesis y convertir el dióxido de carbono (CO2) en oxígeno (O2) y biomasa. Este proceso, fundamental para la vida en la Tierra, no solo contribuye a la purificación del aire, sino que también puede tener múltiples aplicaciones prácticas, desde la producción de biocombustibles hasta la generación de materiales de construcción sostenibles.

El CONICET desarrolló un dispositivo que convierte CO2 en oxígeno y biomasa
La biomasa que se sedimenta y se recoge puede emplearse prácticamente de inmediato como material de construcción para objetos pequeños como macetas, o bien como fertilizante enriquecido para plantas ornamentales en el entorno urbano. Crédito: Citecus.

Además de sus funciones biológicas, el primer dispositivo de este “Árbol líquido” exhibe un diseño que promueve la visibilidad de la investigación y busca crear conciencia en la sociedad acerca de la problemática del cambio climático. Emplazado en una estación de servicio en Figueroa Alcorta y Juramento, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), el Y-ALGAE estará encargado de contribuir con la descarbonización en entornos urbanos.

Desde 2009, el equipo detrás de este proyecto ha dedicado un esfuerzo incansable a su desarrollo. Diez años después, Y-TEC se sumó a la iniciativa encabezada por el investigador del CONICET Leonardo Curatti y en colaboración con INBIOTEC, Y-ALGAE focalizó sus esfuerzos en la creación de reactores para el cultivo de microalgas, expandiéndose desde el ámbito de laboratorio hasta la construcción de módulos en una plataforma tecnológica a escala demostrativa, ubicada en Mar del Plata.

La tarea inicial consistió en explorar diversas cepas de microalgas autóctonas con el objetivo de seleccionar aquellas más idóneas como materia prima. Al mismo tiempo, se avanzaba en el desarrollo de tecnologías a escala de laboratorio para transformar la biomasa algal en biodiesel, bioetanol y biofertilizantes beneficiosos tanto para las algas como para las plantas.

Además de Currati, contribuyeron al desarrollo de Y-ALGAE los miembros del equipo de INBIOTEC Mauro Do NascimentoMacarena Perez Cenci y Marcelo Juárez. En fases futuras de desarrollo se sumarán Luciana Pagnussat y Marcos Lancia.

 

FUENTE: https://www.notaalpie.com.ar/2023/08/28/conicet-co2-en-oxigeno-y-biomasa/