ZARATE: En medio de la recesión, varias marcas deciden cerrar sus locales en el Centro

Los alquileres de los comercios ubicados en calle Justa Lima y en el radio céntrico de la ciudad, aumentaron de forma desproporcionada en este año 2024.
Esta situación generó el cierre de varios locales en el marco de una profunda recesión y crisis económica a nivel nacional, el Centro de Zárate va poblándose de locales vacíos, con el cartel de “venta” o “alquila” dado que resulta insostenible para un comerciante afrontar altos costos en los valores de los alquileres, donde ya superan el millón de pesos, en la mayoría de los casos. A la vez que se suma una importante baja en las ventas minoristas a raíz de la inflación y la pérdida del poder adquisitivo.
En el “angustiante” camino de la “liquidación total por cierre” están algunos comercios, de reconocidas cadenas o de gran prestigio local, que hoy no pueden sostener su alquiler millonario tras la renegociación del contrato de alquiler.
Precisamente, uno de ellos es Paul Carty, en Ituzaingó y Justa Lima; otro Le Uthe, en Justa Lima entre Independencia e Ituzaingó y otro que estaría analizando su cierre es Tiziana jeans, también sobre calle Justa Lima casi Castelli; Media Luna y Pix Helado Artesanal.
Es que hoy en día, y aún con la ordenanza de regularización de los food trucks, a un comercio gastronómico le conviene más este tipo de locales en ferias y los fines de semana que el alquiler de un espacio céntrico.
La situación sigue siendo muy dura para los comerciantes que vieron sus alquileres subir más del 100%; y es por eso que varios locales se vieron obligados a bajar la persiana. Algunos como decisión definitiva y otros buscando otras inmobiliarias o reubicarse en zonas más baratas o, en algunos casos, pasando a la modalidad de venta online con showrooms.
En cuanto a los números que paga un comercio, se fue de 350 mil pesos un alquiler en Justa Lima a un millón doscientos mil pesos. Por lo tanto, y con la crisis económica, a cualquier comercio se le dificulta costear tales valores, ya sea rubro textil o gastronómico.
Otra de las problemáticas que más preocupan a los inquilinos tiene que ver con que los propietarios solicitan alquileres en valor dólar, cuando la mayoría de las personas en Zárate cobra sus salarios en pesos.

«Liquidación por cierre, se vende todo», reza un cartel en un comercio de la calle Justa Lima.

La caída de las ventas

Las ventas minoristas pymes se retrajeron 25,5% en febrero pasado, a precios constantes, y acumulan un declive del 27% en el primer bimestre del año, frente al mismo periodo del año pasado. En la comparación mensual, bajaron 7,4%.
Desde muchos comercios se señaló a febrero como un mes para el olvido, con días consecutivos donde no se registraron ventas. Las familias dejaron visibles todos sus problemas económicos y en los hogares hubo desahorro (los gastos fueron mayores que los ingresos) para llegar a fin de mes. Asimismo, las vacaciones se llevaron el dinero excedente.
En tanto, se registraron algunos problemas para conseguir mercadería por demoras en las entregas. Por falta de liquidez, desde los negocios se hicieron más pedidos de lo habitual a sus proveedores, pero por bajos montos. Los proveedores consultados marcaron que las dificultades en los suministros vinieron por este motivo y no por especulación, ya que en materia de precios febrero tuvo menos incertidumbre que noviembre, diciembre y enero.
En el análisis por rubro, seis de los siete sectores evaluados tuvieron descensos, en comparación con el mismo período del año anterior. La mayor retracción anual se detectó en Perfumerías (-40,9%) y el único incremento estuvo en Textil e indumentaria (+3,5%).
Así surge del Índice de Ventas Minoristas Pymes de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), elaborado en base a un relevamiento mensual entre 1.350 comercios minoristas del país, realizado del 26 de febrero al 1º de marzo.
Las ventas bajaron 33,3% anual en febrero, a precios constantes y acumulan una caída de 35,2% en los primeros dos meses del año frente al mismo periodo de 2023. En la comparación intermensual, bajaron 7,6%. Los consumidores buscaron ofertas y productos de segunda y terceras marcas para abaratar el carrito. En los comercios consultados expresaron que, como estrategia para controlar los gastos, se notaron compras con más frecuencia, pero en menores cantidades. El ramo más afectado fue el de las bebidas, con fuertes subas de precios en los últimos meses, donde el consumidor se privó especialmente de gaseosas, jugos y aguas, especialmente en primeras marcas. Otro alimento que tuvo más sustitución de lo habitual fue la carne, aunque cuando aparecían ofertas se agotaban.

 

FUENTE: diariolavozdezarate.com