El humo que respiramos: crece la demanda de atención por el ecocidio

Usar barbijos N95, cerrar ventanas, evitar la actividad física en momentos de alta densidad de partículas son solo algunas de las recomendaciones. La Asociación de Medicina Respiratoria advirtió su preocupación por los incendios y la creciente consulta por problemas respiratorios. El comunicado.

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El humo que respiramos: crece la demanda de atención por el ecocidio

Usar barbijos N95, cerrar ventanas, evitar la actividad física en momentos de alta densidad de partículas son solo algunas de las recomendaciones. La Asociación de Medicina Respiratoria advirtió su preocupación por los incendios y la creciente consulta por problemas respiratorios. El comunicado.

Crece la preocupación en todo el país por los incendios forestales y en la zona de San Pedro, los focos ígneos sobre las islas que se suman a la quema de pastizales en la zona rural. El viernes, la Asociación Argentina de Medicina Respiratoria remitió un comunicado a los medios para advertir sobre la creciente demanda de consultas en sanatorios privados y públicos y en los consultorios particulares.

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El impacto del humo es cada vez más visible en la salud de la población a través del aumento de hospitalizaciones, visitas al departamento de emergencias y uso de medicamentos para el asma”, comienzan diciendo.

Luego apuntan a la multiplicación de aire contaminado a causa del humo que desde hace meses acompaña la vida de la población más cercana a los focos ígneos y no siempre se visibiliza como problemática en los medios de comunicación.

Consideran que “Los focos de incendios tienen múltiples motivos, y las acciones humanas son responsables del 95% de los casos. La proliferación de los incendios también se explica por el cambio climático: altas temperaturas, intensas sequías, bajos niveles hídricos”.

De ahí en más describen los daños severos que producen en la salud de la población: “El material particulado de los incendios forestales puede viajar hasta 1000 km y, por lo tanto, representar una amenaza para la salud respiratoria en un área amplia. Las emisiones incluyen además monóxido de carbono; óxidos de nitrógeno, incluidos NO2 y óxido nítrico; y compuestos orgánicos volátiles. Éstas producen inflamación que empeora las enfermedades respiratorias crónicas como el asma bronquial y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, cambios genéticos que pueden desencadenar cáncer, aumentan el riesgo de infecciones respiratorias, y tienen efectos directos sobre los ojos, nariz, la piel y otros órganos. Muchas enfermedades respiratorias, incluidas el asma y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, se desencadenan por factores ambientales.

Recomendaciones Asociación Argentina de Medicina Respiratoria para la población:

Las personas más vulnerables a los efectos adversos del humo de los incendios forestales incluyen a los mayores de 65 años, las personas con afecciones cardíacas o respiratorias preexistentes, las personas de áreas socioeconómicas más bajas y los niños debido a su sistema respiratorio menos maduro, y mayor frecuencia respiratoria en relación con el tamaño corporal”.

La entidad además destaca que “el impacto del humo es claramente hoy visible a través del aumento de hospitalizaciones, visitas al departamento de emergencias y uso de medicamentos para el asma”.

  • + Mantenga las puertas y las ventanas cerradas.
  • + Si tiene aire acondicionado, enciéndalo cerrando la entrada de aire exterior, y mantenga el filtro limpio para evitar que entre el humo.
  • + Mantenga la buena calidad del aire interior. No aumente la contaminación del aire de adentro.
  • + No fume tabaco ni ningún otro producto, ya que con ello aumentará la contaminación del aire.
  • + Si las concentraciones de humo son altas, no encienda nada que queme como, por ejemplo, velas o la chimenea.
  • + No pase la aspiradora porque esto mueve las partículas que ya hay en su casa.
  • + Si tiene asma u otra enfermedad pulmonar o cardiovascular, tome sus medicamentos y llame al médico si sus síntomas se agravan.
  • + Si sale, use mascarilla. Las mascarillas contra el polvo no son suficientes, no protegen a los pulmones contra el humo. Las mascarillas “N95” brindarán algo de protección cuando se usan adecuadamente.
  • + Evite o minimice las actividades recreativas y/o deportivas al aire libre.

Tras los consejos, la asociación apela a que se tome conciencia y se apunte a un esfuerzo compartido de prevención y cuidado de los humedales de los cuales un 21% pertenecen a la Argentina.

“Convocamos a generar una agenda que contemple estrategias a corto y largo plazo focalizada en este importante problema sanitario que representa una amenaza para la salud respiratoria. Proponemos el relevamiento del conocimiento social del tema, actividades de educación, concientización y trabajos de investigación que pongan de manifiesto su impacto sobre la salud”, concluyeron.

 

FUENTE: https://www.laopinionsemanario.com.ar/noticia/el-humo-que-respiramos-crece-la-demanda-de-atencion-por-el-ecocidio/