– “Destruida”, dice Samanta Ferreira. “Quiero Justicia, nada más que eso”, agrega. “Tomas era un chico muy bueno. Un pibe normal como cualquier otro que va a la escuela, trabaja, se compra sus cosas. No le pedía nada a nadie”.
Pasó a verla el equipo de psicólogos municipal para ofrecerle ayuda; también la visitó Juan de Jesús, intendente del Partido de la Costa, del que forma parte esta localidad que, está conmocionada por el asesinato de Tomás. Ella solo quiere Justicia.
También se comunicó Graciela, la mamá de Fernando Báez Sosa, el joven asesinado a golpes en enero de 2020 afuera del boliche Le Brique, en Villa Gesell. “Es muy triste lo que pasó con Tomás”, decía el mensaje de condolencia que le envió. “Siento mucho dolor y comparto con la familia tanta tristeza, sé y comprendo lo difícil que es perder un hijo”.
![Samantha , madre de Tomás Tello, joven asesinado en Santa Teresita.](https://resizer.glanacion.com/resizer/v2/samantha-madre-de-tomas-tello-joven-asesinado-en-MAHWEHUVNVCIRKM27RVMHKGRR4.jpeg?auth=c0532181ba17fba4c716769dadcae7434b03b6385c6680733a730b77bcf5da3a&width=420&height=284&quality=70&smart=true)
Está, además, a punto de parir a Morena; tiene programada la cesárea para hoy 8 de enero. Es mamá de Milagros, una beba de dos años, y de Camila, de 14, que vivía con Tomás en la casa de sus abuelos. Fueron ellos quienes criaron a los dos mayores, en una casa de dos pisos situada en la calle 55, de Mar del Tuyú, en un barrio humilde de calles de tierra y construcciones bajas de ladrillos.
“Tomás era un chico muy bueno, era trabajador”, dice Samanta. Trabajaba con su tío “Carlitos”, el hermano de su papá. Era albañil y tenía pensado retomar la escuela nocturna.
“Yo lo he llevado a las 4 de la mañana y a las 7 los veía trabajando con Carlitos”, cuenta un remisero que también se acercó a saludar a la familia.
![Samantha , madre de Tomás Tello, joven asesinado en Santa Teresita.](https://resizer.glanacion.com/resizer/v2/samantha-madre-de-tomas-tello-joven-asesinado-en-MFVT3EDW7BBUNAK54MH6BL2FSM.jpeg?auth=5c7412f05cb8747a9948b8bf87fd2b37769a5421f19dc832b83cc667c1f20e41&width=420&height=318&quality=70&smart=true)
“Él esperaba los fines de semana para ir a la peluquería a cortarse el pelo. Era un pibe normal, no se drogaba, nada”, dice su mamá con los ojos hinchados de llorar.
Samanta se enteró por un llamado, cerca de las siete de la mañana, que su hijo estaba en el hospital municipal, donde ella trabaja como enfermera; cuando llegó, ya estaba muerto. Su hijo había pasado la Navidad con ella y el 31 le tocaba con su padre. Después se fue a la Carabela, la zona de la costanera de Santa Teresita entre la calle 39 y la 40 que tiene como hito la enorme réplica de la Santa María, lugar donde los jóvenes suelen juntarse para festejar Año Nuevo.
Ahí empezó la pelea en la playa con este grupo; cuentan que en un principio eran cerca de 30, que varios serían oriundos de Morón y que se afincaron hace un tiempo aquí, para trabajar como vendedores ambulantes.
Se conocían de antes. Habían ido a la fiesta de cumpleaños de Camila y después también quisieron entrar en una fiesta organizada por el propio Tomás el 23 de diciembre, de donde él mismo los habría echado por disturbios. En ese episodio, según cree la Justicia, quedó plantada la semilla del drama que se concretaría en las primeras horas del nuevo año.
![Samantha , madre de Tomás Tello, joven asesinado en Santa Teresita.](https://resizer.glanacion.com/resizer/v2/samantha-madre-de-tomas-tello-joven-asesinado-en-BRPKPYBH5ZHO3JTPHTEIQX57HA.jpeg?auth=5095501743d7b3f6afc603e067b05626719dcb817156a6190fe958f4307e27fa&width=420&height=302&quality=70&smart=true)
“De esa noche no sé nada porque estoy esperando a hablar con los amigos de Tomi. Lo que sé es lo que me voy enterando por la tele. Quiero Justicia, nada más que eso”. Sabe algunas cosas más de aquel entredicho; nada que le permita entender por qué le arrebataron a su hijo.
Luis, dueño del hotel, estaba sacando las mesas a la vereda cuando la vio volver a su casa, cerca de las 8.30 del 1 de enero. “Me mataron a mi hijo”, le contestó ella a su saludo de feliz año. Él cruzó y la abrazó, le preguntó si le habían pegado y a dónde estaba internado. “Lo mataron, Luis, vengo de reconocer el cuerpo”, le respondió ella.